El Congreso de la Ciudad de México exhortó a la Secretaría de Cultura capitalina, en su calidad de secretaría técnica de la Comisión Interinstitucional del Patrimonio Cultural, Natural y Biocultural de la Ciudad de México, a declarar “el oficio tradicional de organillero”, como patrimonio cultural inmaterial de la capital.

Al subir a tribuna, la diputada de la Asociación Izquierda Liberal, Andrea Vicenteño Barrientos, resaltó el carácter histórico de las personas dedicadas a este oficio, que es parte del legado revolucionario.

Sostuvo que es fundamental apoyar a las personas dedicadas a esta actividad tradicional, «para que las generaciones que nos siguen disfruten de esta música que es parte de nuestra historia”, afirmó.

Comentó que se tiene registro de 500 organilleros a nivel federal, de los cuales 450 se concentran en la capital, mismos que actualmente enfrentan dificultades para mantener su actividad, debido a que no cuentan con ingreso fijo, carecen de reconocimiento y apoyo de programas específicos.

Por ello, legisladora pidió tener en cuenta que el 50% de los integrantes de este gremio, alquilan diariamente el aparato musical que utilizan y costean sus uniformes, gastos a los cuales se suma el almacenamiento, la competencia con otros artistas urbanos y la variabilidad de ingresos por temporada y afluencia de visitantes.