Maraña Capitalina

Anduvieron sueltos los ‘diablitos navideños’ en el Antiguo Palacio de Donceles

Bien lo dijo Jesús Sesma Suárez, presidente de la Mesa Directiva del Congreso capitalino, “estos diablitos navideños” hacen de las suyas en esta antepenúltima sesión ordinaria. Aunque de esto se percató luego de casi cuatro horas, cuando ya no aguantó los constantes “errores” que cometió la Coordinación de Servicios Parlamentarios. Para ser sinceros a don Chucho se le hizo más fácil culpar a esta área, que aceptar que estas fallas fueron provocadas por el grupo parlamentario del PAN, al presentar, de último momento, reservas en algunos de los 19 dictámenes –que más tarde crecieron a 21, debido a que la Junta de Coordinación Política (Jucopo), también de último momento, metió esos puntos al orden del día–, lo que provocó que el guion que se prepara previamente a las sesiones, cambiara repentinamente. Eso lo sabe el tocayo del Supremo, pero le conviene más echarle la culpa a los trabajadores del Congreso, que a sus cuates del blanquiazul, quienes gozan meter en problemas al titular de esa área, Alfonso Vega González. Sin embargo, no sólo fue Servicios Parlamentarios quien la “regó” –por culpa de los panistas–, en la sesión de este jueves, también el área de Innovación, a la que literalmente se le cayó el sistema a las 14:16 horas, cuando la entonces presidenta de la Mesa, Olivia Garza de los Santos, del PAN, ordenó a la secretaria, Cecilia Vadillo, de Morena, proceder a la votación de uno de los dictámenes que presentó Rebeca Peralta León, del PVEM. Entonces, la morenista, con su “dulce y angelical voz” –que molesta más que el pitido del carro de camotes–, informó que el Sistema Electrónico de votación no responde. Por ello, la panista pidió a Innovación solucionar el problema. De ahí que los diputados tuvieron que votar de viva voz, lo que retrasó, aún más, la intrincada sesión. Bueno, “el diablito navideño” que rondó este jueves en el Antiguo Palacio de Donceles, como lo detectó atinadamente don Chucho, provocó el enojo de la presidenta de la Mesa en turno, Yuriri Ayala Zúñiga, cuando casi al final el panista Raúl Torres, pidió un minuto de aplausos para la venezolana María Corina Machado Parisca, ganadora del Nobel de la Paz, “quien ha sufrido ante un régimen dictatorial, como es Venezuela”. Como era de esperarse, comenzaron los gritos y protestas de los legisladores de Morena. Incluso, exigieron a la presidenta de la Mesa callarlo. Yuriri no respondió de inmediato. Consultó con Vega González, quien sólo se le vio mover negativamente la cabeza. En eso, fiel a su costumbre protagonista de querer estar en todo, el novel morenista, Paulo García, pidió la palabra para decir que “es lamentable que este partido no pierde la oportunidad para alabar la política de Estados Unidos. Por ello, señora presidenta, le pido que someta a votación esta propuesta”. Y pese a que estaban presentes sólo nueve morenistas y casi todos los panistas, la presidenta validó las palabras de “voz dulce” de su secretaria: “Diputada presidente, no es aceptada la propuesta”. De ahí que la panista, Olivia Garza, con el rostro enrojecido y apuntándole con el índice casi en su cara, le exigió a Yuriri pedir a la secretaria contar bien. Pero Yuriri ya estaba más enrojecida que la panista, por lo que dio por concluida la sesión a las 16:13 horas, y antes de hacer sonar la campanilla, citó al Pleno para las 9:00 horas del próximo sábado, entre protestas y ofensas de los panistas, que se quedaron con las ganas de aplaudir a la venezolana.

Pronto borrarán de la historia a Cristóbal Colón, para poner el de AMLO

La que no se midió este jueves con los dictámenes que presento y aprobó el Pleno del Congreso local, fue la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, Jannete Guerrero Maya, del PT, al proponer que el “Día de la Raza” –creado en memoria de aquella lucha que en 1492 libraron los indígenas y los colonizadores españoles, luego de que el marinero genovés Cristóbal Colón descubriera el Nuevo Mundo–, ahora pidió y fue aprobado por unanimidad, que el 12 de octubre sea llamado –con un algo sencillito, para que los mexicanos se nos quede grabado–, como: “Día de la Nación Pluricultural, la Resistencia Indígena, Afromexicana y la Lucha Contra el Racismo”. ¿A verdad? Ya ven que no solo los morenistas tienen ocurrencias. Lo que más sorprendió es que la propuesta fue aprobada en dos ocasiones: una, por la Comisión de Normatividad, Estudios y Prácticas Parlamentarias; y dos, por el Pleno del Congreso local, como resultado de dos iniciativas que presentó la bella petista. Esto lo hizo, quizá, con la intención de que si no salía en una, lo haría en la otra; pero ambas fueron aprobadas en Comisión y por el Pleno. De ahí que varios de los presentes a la sesión ordinaria de este jueves, con ironía comentaron que así como van las cosas, seguro esta legisladora en el próximo periodo va a pedir borrar de la historia el nombre de Cristóbal Colón, para exigir en su lugar el de Andrés Manuel López Obrador, con eso de que ya consideran a México como de sus propiedad. Así que no será extraño que para febrero próximo, cuando arranca el siguiente periodo, doña Jannete presente esta iniciativa, pues sabe que sería bien recibida por los morenistas, que a cada momento quieren quedar bien con el falso Mesías de Macuspana. ¿A poco no?

Alcaldesa de Iztacalco pide licencia por ‘motivos de salud’, no por la Navidad, eh

A la que simplemente ya le valió poco su trabajo como alcaldesa de Iztacalco, es a María de Lourdes Paz Reyes, quien anunció al Congreso capitalino que se ausentará de su cargo partir del sábado 20 –es decir, cuatro días antes de Navidad–, para regresar nueve días después. Que fácil, no. Anunció que “por motivos de salud”, como si sus vecinos y por quien votaron por ella se chuparan el dedo. Entre sus votantes se rumora que en realidad va someterse a una más de sus acostumbradas cirugías plásticas –que tanto le encantan y que cada vez la dejan peor–, y su médico será Santa Claus y sus enfermeros los renos: Rudolph, Dasher, Donner, Dancer, Vixen, Cupid, Comet, Blitzen y Prancer, pero, como sabemos, el primero de ellos es el más famoso, Rudolph –o Rodolfo, para lo que estudiaron en escuelas de gobierno–. Así que doña Lulu, no nos cotorré, de que pide estos días navideños por “cuestión de salud”. Mejor diga que a pasar la Navidad con la familia de su famoso cuñado: Sergio Michel Pérez Mendoza, mejor conocido como “Checo Pérez”. Ah, pero a esta mujer, como es de Morena, ningún pero le pusieron sus cómplices legisladores, pues, junto con el PAN, PRI y los demás partidos políticos, le aprobaron por unanimidad la cirugía –perdón, la licencia–. No fuera Alessandra Roo de la Vega Piccolo, quien hace unos días hizo lo mismo y varios de los muchachos de “ya saben quién”, la criticaron de abandonar la alcaldía Cuauhtémoc, del 5 al 8 del presente mes. Hasta la acusaron de haber huido del país, para evitar ir a prisión, cuando en realidad salió al extranjero por un viaje de cumpleaños que le prometió a uno de sus hijos. Pero a Lourdes Paz nada le dicen. Puede irse tranquila, señora alcaldesa. Aquí tiene a sus cuates de Morena que la protegen y cuidan. Total, que tanto son nueves días, aún y cuando coinciden con las piñatas y Navidad. Y, sobre todo, porque deja como encargado del despacho a Oscar Eugenio Gutiérrez Camacho, director general de Gobierno y Seguridad Ciudadana. Pobres vecinos, dejan a Lutero como encargado de la Iglesia.