
El diputado local del PRD –aunque en realidad es de Morena–, Pablo Trejo Pérez,
exhortó a la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación (SECTEI) y al Subsistema de Educación Comunitaria (Pilares), fomentar cursos y talleres de Lengua de Señas Mexicana (LSM) en las 16 alcaldías, cuya propuesta fue aprobada por unanimidad por el pleno legislativo.
Explicó el “perredista”, que no es menor la persona que carecen del sentido auditivo en el país, pues el 12.1% de las personas con discapacidad –es decir, 649 mil 451–, tienen dificultades para escuchar, aunque sólo cerca de 100 mil se comunican a través de la Lengua de Señas Mexicana (LSM).
Incluso, sostuvo que en la Ciudad de México, se estima que hay 483 mil 45 personas sordas, de las cuales aproximadamente 57 mil 965 se comunican a través de la LSM.
Desde tribuna del Antiguo Palacio de Donceles, Trejo Pérez destacó la importancia de la LSM, “como un idioma completo y una herramienta esencial para derribar las barreras de comunicación que enfrenta la comunidad sorda”, afirmó.
Durante su discurso, el legislador insistió que la LSM, “no es un simple conjunto de gestos, sino un idioma con su propia gramática, sintaxis y riqueza expresiva”.
Incluso, calificó este sistema, como “la llave que abre las puertas de la comunicación para miles de personas”.
Subrayó que al aprender LSM, la sociedad no solo adquiere una nueva habilidad, sino que también derriba barreras y construye puentes de comunicación fundamentales.
El diputado por el Distrito 15 de Iztacalco aseguró que este idioma, tiene un reconocimiento legal tanto a nivel internacional como nacional, lo que ha significado un avance crucial en los derechos de las personas sordas, al garantizar su acceso a una educación bilingüe, capacitación de intérpretes y servicios oficiales accesibles.
Además, sostuvo que, en la Ciudad de México, la Constitución Política reconoce a la LSM, como un idioma oficial y parte del patrimonio lingüístico de la capital.
Al respecto, citó el artículo 8, apartado B, numeral 7, que establece: “Las personas sordas tendrán derecho a recibir educación en Lengua de Señas Mexicana y en español”.
Por ello, reiteró, “este reconocimiento es más que simbólico. Es un paso hacia la igualdad real y la plena participación de las personas sordas en la vida pública, educativa, institucional, laboral y cultural”, dijo.
La implementación de talleres de LSM en las 16 alcaldías de la Ciudad de México, señaló, tendría un impacto profundo y multifacético.
Además, en el ámbito educativo, permitiría la convivencia e integración genuina entre estudiantes sordos y oyentes.
Mientras que, en el sector de la salud, los profesionales podrían comunicarse directamente con sus pacientes sordos, garantizando una atención de calidad y más humanizada.
En tanto, en el mercado laboral, se abrirían nuevas oportunidades para las personas sordas, permitiendo que sus habilidades y talentos sean aprovechados al máximo.
Trejo Pérez concluyó su intervención destacando que la propuesta no sólo beneficia a la comunidad sorda, sino a toda la sociedad, “pues nos hace más conscientes de la diversidad que nos rodea y más capaces de interactuar con el mundo de una manera más completa”, enfatizó.
Para él, este proyecto no es monumental, sino una iniciativa necesaria, complementaria y factible.
Descubre más desde Donceles Portal
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
