
Al hacer alarde de su relación con grupos delincuencial, como el de “La Unión de Tepito”, la presunta invasora de predios, Claudia Morales Reyes, quitó los sellos que colocó Protección Civil del Gobierno capitalino del inmueble de Belisario Domínguez 43, “considerado de alto riesgo por lo que no puede ser ocupado”.
Los hechos fueron denunciados por los integrantes de las 38 familias, que fueron despojadas de sus viviendas por esta mujer y que habitaban el lugar, el cual más tarde fue expropiado para construir vivienda popular.
Lorena García Alonso, dirigente del grupo “Alianza Mexicana de Organizaciones Residentes (AMOR)”, comentó que durante años han peleado para que el INVI construya los departamentos de interés social, «como nos prometió. Queremos que se imponga el estado de derecho en este predio, que las autoridades no se dejen presionar por los presuntos delincuentes”, exigió.
Sin embargo, sostuvo que “puede haber contubernio entre algunos policías de investigación y la invasora», pues algunos familiares de Claudia Morales Reyes, como su esposo, Martín Rebolledo, y el hijo, César Jonathan Martínez, que están en la cárcel por violación y diversos delitos del fuero común, además de que hay varias carpetas de investigación en su contra.

Asimismo, señaló García Alonso, inmediatamente que se retiraron los funcionarios después de colocar los sellos, “Claudia salió y los empezó a quitar, alardeando que no estaba sola y que la diputada Dolores Padierna y gente de la Unión velaban por ella», señaló la vecina.
Incluso, denunció que la invasora, «enfurecida gritó a los cuatro vientos que a ella el Gobierno de Clara Brugada le pela los dientes. Nadie puede hacerme nada. Estoy blindada con los grupos delictivos del Centro de la Ciudad de México”, aseguró.
A decir de los desalojados, “Claudia Morales no quiere dejar su mina de oro, pues les renta a más de 80 inmigrantes, entre los que están venezolanos, nicaragüenses, salvadoreños y hasta asiáticos, lo que fueron nuestros departamentos. Además, el predio lo ha convertido en un centro de distribución de drogas y refugio de maleantes. Todos los vecinos de la zona lo sabemos, por lo que dudamos que los de la Fiscalía General de Justicia capitalina desconozcan del tema”, acusó.
Lorena García Alonso, del Grupo Amor y defensora de los desalojados del citado predio, recordó que dicho inmueble fue expropiado por el entonces jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador, el 20 de agosto de 2004, por presentar daño estructural y le encargó al INVI construir departamentos de bajo costo, para la gente que no puede pagar lujos y que además no son dignos de crédito bancario alguno.
Ante ello, los afectados, así como su representante Lorena García Alonso, exigen a las autoridades, “actuar de forma rápida y expedita, pues tememos por nuestra vidas al conocer el tipo de relación que tiene Claudia Morales con La Unión de Tepito y Padierna Luna”, enfatizaron.
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