PVEM propone vivienda y salud para mujeres que salen de prisión

Con la suscripción de casi 20 legisladores, la diputada local del PVEM, Rebeca Peralta León, presentó una iniciativa para que el Gobierno capitalino garantice los derechos humanos fundamentales de vivienda y salud, para las mujeres que egresan de prisión, especialmente las adultas mayores y aquellas que carecen de redes de apoyo familiar y están en situación de vulnerabilidad.

Por ello, la pevemista propuso reformar la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia de la Ciudad de México, “porque todas las personas merecen una segunda oportunidad, independientemente de sus errores pasado” e, insistió, apoyar la reinserción es un acto de justicia y equidad.

“La iniciativa que hoy presento, tiene como principal objetivo visibilizar a las mujeres que están por obtener su libertad, debido a que ya cumplieron con la condena que les fue impuesta”, subrayó.

A las mujeres que salen de la cárcel, “les deben brindar el apoyo necesario para reconstruir sus vidas y reintegrarse a la sociedad de manera plena y digna”, afirmó la también vicepresidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Congreso local, al presentar la iniciativa para reformar los artículos 3, fracción XI; 35, fracción III; 49, primer párrafo; y 50, primer párrafo, de la citada ley.

Desde la tribuna del Antiguo Palacio de Donceles, la ecologista se pronunció porque las autoridades briden apoyo para atender las necesidades de las mujeres que están o salen de las prisiones, sobre todo, en estos momentos en que siete adultas mayores, con problemas psicosociales, están por salir del Centro Femenil de Readaptación Social (Cefereso) Tepepan y no tienen a dónde ir.

Precisó que en Tepepan, están recluidas 39 mujeres adultas mayores con problemas de discapacidad física, 25 con discapacidad psicosocial, 10 inimputables, 30 con enfermedades crónico, degenerativas, siete con VIH, 25 LGBTTTI+, 10 inimputables, cuatro indígenas y cinco extranjeras, además de 22 en absoluto abandono y nadie las atiende.

“Tenemos el caso de Maribel Nuñez, quien sufre de discapacidad psicosocial y física. Estuvo confinada 11 años, pero obtendrá su libertad el próximo 27 de mayo y no tiene a dónde ir, pues los albergues nos han rechazado recibirla.

Peralta León destacó que “apoyar a la reinserción social de las mujeres que salen de prisión es fundamental y brindarles las herramientas y el apoyo que necesitan para reintegrarse a la sociedad, reduce la probabilidad de que vuelvan a delinquir”, señaló la diputada.

“Aunque se piense que cuando una mujer sale de prisión, se considerara que al cumplir con la condena impuesta todo estará́ bien de ese momento en adelante. Pero la realidad muestra que al salir de un centro de reclusión, empieza una nueva batalla, ya que el tema de la reinserción social de las mujeres en México significa un largo camino para el restablecimiento de sus derechos”, aseveró.

La representante popular por el Distrito 24 de Iztapalapa comentó que la falta de una política de reinserción social para las mujeres que egresan de los centros de reclusión, puede obstaculizar sus oportunidades laborales y su capacidad de reintegrarse a la sociedad por dificultades como: Falta de programas de reinserción social; Falta de perspectiva de género en los programas de reinserción social.

Además, la estigmatización que sufren al ingresar a las instituciones penales; Falta de información sobre sus derechos; Falta de acceso a medicamentos para sus tratamientos; y, muy importante, falta de acceso a un lugar digno donde vivir.

La pevemista lamentó que “gran parte de las mujeres que obtienen su libertad, pero las que salen de prisión siendo adultas mayores, en el proceso de cumplir con la condena que les fue impuesta, fueron olvidadas por diversas circunstancias y en algunos casos despojadas de sus casas y pertenencias”, afirmó.

Estas mujeres, insistió la diputada, “salen a enfrentar un mundo para el que sienten que ya no están preparadas, sienten que ya no encajan, están olvidadas, señaladas y estigmatizadas. Todo esto las afecta severamente, ya que la experiencia de la prisión puede ser traumática y generar problemas de salud mental como depresión, ansiedad y estrés postraumático”, anotó.