Con seis votos en contra –cuatro del PAN, uno de PVEM y otro de Morena–, por 15 a favor –de Morena, Movimiento Ciudadano y PRI–, las Comisiones Unidas de Administración y Procuración de Justicia, y la Igualdad de Género del Congreso de capitalino, aprobaron el dictamen que despenaliza por completo el aborto en la Ciudad de México.

Vanos resultaron los argumentos del PAN, PVEM y una diputada morenista, pues por mayoría los legisladores locales avalaron derogar los artículos 144, 145, 147 y 148 del Código Penal capitalino, que criminalizaban el aborto después de las 12 semanas de gestación; asimismo, queda eliminado el delito de aborto del artículo 76 de la misma norma.

Quienes votaron en contra fueron los panistas: Olivia Garza de los Santos, Lizzet Bernal (suplente de Daniel Ávlarez–, Enrique Sánchez Flores y Diego Garrido López, así como Yolanda García Ortega, del PVEM; y Paula Alejandra Pérez Córdova, quienes echaron por tierra los planes de Morena para que el dictamen fue aprobado por unanimidad.

Sin embargo, ante la presión de los panistas de suspender la sesión por irregularidades en la convocatoria, pues no avisaron con 48 horas de anticipación, como lo establece la Ley Orgánica y el Reglamento del Congreso local, el presidente de la Comisión de Administración y Procuración de Justicia, Alberto Martínez Urincho, de Morena, aclaró que la reunión fue convocada “de urgente”.

En respuesta, el panista, Diego Garrido, advirtió que su partido impugnará la misma, “porque es ilegal”.

Al argumentar el dictamen, la diputada del PT, Jannete Guerrero Maya, destacó que la despenalización del aborto no es sólo un tema de salud, sino de justicia social y de derechos humanos, para que las personas gestantes puedan tomar decisiones seguras y dignas sobre su vida reproductiva.

Subrayó que despenalizar es no castigar, mientras que legalizar es permitir y regular, “lo que nosotros estamos haciendo es despenalizar, no confundamos”, sostuvo ante la desaprobación de los panistas, la pevemista y la morenista, quienes eran observadas con enojo por las legisladoras del guinda, petistas y la priista, Tania Larios Pérez, la cual en su momento habló como su fuera morenista.

Por su parte, la diputada del PAN, América Rangel Lorenzana –que no pertenece a ninguna de dichas Comisiones–, detalló que con esto eliminan el límite para abortar hasta las 12 semanas de gestación, lo que implica que ahora podrán realizarlo en cualquier etapa del embarazo.

“Incluso un minuto antes de parto, matando a un ser humano completamente formado y preparado para vivir”, destacó la panista que en todo momento ha defendido el embarazo y, en consecuencia, la vida tanto de la mujer como del producto.

En tanto, la morenista, Valentina Batres –con su típica manera de “declamar”, no de hablar–, recordó que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) dejó en claro que criminalizar a quienes buscan un aborto, es incompatible con los derechos humanos y la justicia.

Mientras que la panista, Olivia Garza, apuntó que el niño no nacido tiene derecho a la vida, “por lo que si hablamos que vamos a interrumpir el embarazo o el parto cerca del nacimiento, es un niño que ya tiene vida propia, lo estaríamos asesinando”, resaltó.

La legisladora de Morena, Valeria Cruz Flores, recalcó que no van a matar bebés “por lo que no sé si reír o llorar con los argumentos de la oposición”, sostuvo con irónica sonrisa.

Del mismo partido, Elizabeth Mateos, recordó que en 2007 fueron la primera Ciudad en aprobar la interrupción legal del embarazo, y que ahora vuelven a marcar el rumbo con la aprobación de este dictamen, que busca ponerse un alto al estigma y criminalización hacia las mujeres que deciden interrumpir su embarazo.

“No aceptaremos más la opresión disfrazada de moralidad. Este no es un espacio para abrazar ideas fascistas y conservadoras. En la Ciudad de México luchamos por nuestros derechos y no permitiremos que la derecha imponga su agenda retrógrada sobre nuestras vidas”, sostuvo con mirada amenazante a los legisladores del blanquiazul.

A su vez, la coordinadora del PRI, Tania Larios Pérez, comentó que esta discusión revivió los tabúes y estigmas que parecían ya superados tras la despenalización del aborto hasta las 12 semanas en 2007 –lo que confundió a propios y extraños, pues más parecía diputada de Morena y de la oposición.

Una de las promoventes de esta iniciativa y morenista, Yuriri Ayala Zúñiga, recordó que la Fiscalía General de Justicia (FGJ) capitalina, de enero a septiembre del presente año, abrió 131 carpetas de investigación contra de mujeres por abortar, por lo que, enfatizó, “debe dejar de criminalizarse este tema”.

Luego de tres horas y seis minutos de escuchar los argumentos de los 21 integrantes de dichas Comisiones Unidas, a las 12:05 horas, Martínez Urincho anunció que el dictamen “ha sido aprobado, tanto en lo general como en los particular”, por lo que enviará el documento a la Coordinación de Asuntos Parlamentarios y a la presidencia de la Mesa Directiva, para que sea integerdo el orden de trabajo de la sesión ordinaria del próximo jueves.

Así, a las 12:06 horas, el morenista dio por concluida la maratónica reunión, entre aplausos, gritos y vivas de los morenistas, petistas, moecistas y priistas, quienes todavía miraron con recelo a las legisladores del PVEM y Morena que votaron en contra; frustraron su intentona de sacar el dictamen por unanimidad.


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