
Por falta de acuerdos políticos, la Comisión de Bienestar Animal del Congreso capitalino modificó la Ley de Protección Animal y dejó fuera del dictamen prohibir las corridas de toros, los jaripeos, charreadas y peleas de gallos, así como las carreras de caballos o perros
Sin embargo, los integrantes de dicha Comisión aprobaron prohibir la celebración de espectáculos con animales en espacios públicos y privados, sobre todo, cuando estos seres sean víctimas de abuso o maltrato, cuyos casos serán atendidos con base en denuncias ciudadanas en el Juzgado Cívico o por la autoridad competente.
Cabe aclarar que a la reunión de Comisión, no se enlazaron los diputados del PAN, PRI y PRD, quienes en todo momento se opusieron a las observaciones que hizo el Ejecutivo local, «pero ni sus berrinches provocaron que el dictamen fuera aprobado» comentaron diputados de MORENA y aliados.
El diputado del PVEM y presidente de esa Comisión, Jesús Sema Suárez, precisó que el dictamen aprobado esta mañana, es sobre 10 iniciativas que fueron aprobadas por el pleno el pasado 31 de mayo, pero que fueron observadas por el jefe de Gobierno un mes después.
Precisó que una de esas observaciones, fue dejar fuera de este dictamen las peleas de gallos, “por lo que ya no se incluyó”.
Además, sostuvo Sesma Suárez, con estas reformas los legisladores atendieron diversas problemáticas, como la generada por las personas paseadores de perros, mismas que serán regularizadas para evitar que más animales sean maltratados.
De igual forma, crean una regulación más estricta para las personas prestadoras de servicios como pensiones, guarderías, escuelas de adiestramiento, estéticas, spa, gimnasio, tratamiento etológico y servicios funerarios o de incineración de los animales fallecidos.
Asimismo, los integrantes de la Comisión de Bienes Animal del Congreso local avalaron que la persona tutora responsable, está obligada a recoger las heces de su animal cuando transite en la vía pública, debiendo contar con las herramientas y materiales necesarios para depositarlas en los lugares destinados para ello.
También, los tutores deberán asegurarse que el animal que pasean porte collar o pechera adecuado para su especie, características y edad, mismos que deberá tener bordado, grabado o en una placa de identificación: el nombre del animal, la clave del Registro Único de Animales de Compañía (RUAC) y datos de contacto de la persona responsable.
Con relación a la eutanasia, especifica el dictamen que en los casos en que podrá aplicarse a los animales no destinados al consumo humano y la forma en que se desarrollará, así como que la persona responsable de aplicarla sea médico veterinario-zootecnista.
Empero, en casos en que se tenga que terminar la vida de un animal por problemas conductuales, establece la norma que deberá contarse con un diagnóstico que emita un médico veterinario-zootecnista que cuente con la especialización o certificación comprobable en la materia de etología.
Modernizar microbuses
Por otra parte, Sesma Suárez busca que sea obligatoria la colocación de cámaras de video, botones de pánico y geolocalizadores en todos los microbuses, debido a que son el transporte público más inseguro para viajar en la capital.

El también coordinador de la Asociación Parlamentaria Alianza Verde en el Congreso local insistió que la probabilidad de que una persona sufra algún tipo de delito en los microbuses es del 80%, “pero instalando cámaras de seguridad y geolocalización podríamos reducir en 55%”, destacó.
Aseguró que de acuerdo a la Fiscalía General de Justicia (FGJ) capitalina, de enero a noviembre de 2023, abrió un total de 698 carpetas de investigación por robos con violencia en el transporte público colectivo, como: Metro, Metrobús, Trolebús y microbuses.
Además, destacó el pevemista, que de los más de 600 robos investigados por la FGJ, 328 ocurrieron en los microbuses concesionados, lo que representa el 47% del total de estos ilícitos.
En ese contexto, Sesma Suáres reiteró que el principal factor por el que los microbuses son el primer lugar en robos con violencia, en comparación con los demás sistemas de transporte locales, es porque existe un rezago en su modernización.
Ante ello, exige la implementación de los elementos tecnológicos en los también llamados “micros”, pues permitiría garantizar la seguridad que tanto necesitan los pasajeros de las rutas con los mayores índices de inseguridad, como: San Lorenzo-San Vicente, Metro Santa Martha-Metro Iztapalapa, Metro Constitución-San Lorenzo, así como la ruta de la Línea 8 del Metro Garibaldi-Lagunilla-Constitución de 1917, entre otras.
“Podríamos contar con imágenes de lo que ocurre al interior del transporte y se complementa con los botones de pánico para los operadores que son utilizados en caso de robo, riña, acoso sexual o emergencia médica. Además, al estar conectados con el C5, permitirá tener una actuación en tiempo real para reducir los niveles de inseguridad y, en consecuencia, garantizar que las mujeres viajen seguras”, insistió.
Cabe destacar que la iniciativa a la Ley de Movilidad está en la Comisión de Movilidad Sustentable y Seguridad Vial desde el pasado 25 de abril.
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