En el Congreso de la Ciudad de México se plantea implementar una contribución o impuesto especial para los denominados nómadas digitales, que son aquellos que permanecen en la Ciudad de México más de 28 días en inmuebles alquilados a través de plataformas digitales o en habitaciones de hotel.

Lo anterior, tiene como propósito regular la estancia de este sector de la población y a su vez aportar para el saneamiento urbano y la atención de diversos problemas derivados de la gentrificación en la capital como son: desarrollo urbano, transporte y vivienda.

La tarifa que se cobraría es de una UMA por noche, es decir, 103.74 pesos y estos recursos deberán ser reportados y entregados a la Secretaría de Finanzas cada 15 días.

Asimismo, quienes incumplan esta disposición serán sancionados económica o administrativamente, de acuerdo a la ley.

 “La presente iniciativa tiene como objetivo implementar acciones dirigidas a regular y controlar la llegada de nómadas digitales a la Ciudad de México con lo cual se pueda establecer un equilibrio entre los beneficios de esta actividad sin ignorar los aspectos negativos que se producen en perjuicio de la calidad de vida de las y los capitalinos”, expuso la promovente de esta propuesta y presidenta de la Comisión de Turismo del órgano legislativo, Frida Guillén.

Refirió que un ejemplo de desplazamiento forzado, consecuencia de este fenómeno, de los capitalinos de diversas zonas es que “en México los nómadas digitales pueden entrar y salir del país cuando quieran, así como permanecer en el país por un tiempo indefinido, propiciando que las plataformas de renta de espacios residenciales —como AirBnB, Booking, Expedia, Home Away— eleven los precios de renta por noche, incluso por mes”.

Por lo que, esto “produce un efecto poco deseado en los precios de las rentas y la vivienda alrededor de la zona si se consideran los principios económicos de oferta y demanda que determinan el funcionamiento del mercado”.

Agregó que el poder adquisitivo de los nómadas digitales está muy por encima del promedio nacional, puesto que, mientras que un mexicano gana en promedio de 8 a 10 mil pesos, los nómadas tienen un salario promedio de más de 5 mil euros que se traducen en más de 100 mil pesos mexicanos.

“Los extranjeros que vienen a vivir a la capital pueden acceder a departamentos en las colonias más adineradas de la ciudad fácilmente, mientras que los locales no aguantan los precios cada vez más altos de sus propias colonias forzándolos a abandonar sus residencias y buscar sitios más baratos para poder vivir”, destacó.

La iniciativa que busca reformar el Código Fiscal de la capital fue turnada a la Comisión de Hacienda con opinión de la Comisión de Turismo para su análisis y dictaminación.