Todo ocurría como una sesión ordinaria más al interior del Congreso capitalino, pese a que los trabajos de este martes comenzaron con una hora y 23 minutos de retraso, dado que sólo estaban presentes 44 de los 66 diputados locales.

Nadie se imaginó lo que vendría minutos después, al grado que tendrían que suspender la reunión, “porque no hay condiciones para seguir”, dijo el presidente de la Mesa Directiva, Fausto Zamorano Esparza.

Y no era para menos, pues para ese momento dos de los activistas transgénero, que rompieron cristales y barrotes de los grandes portones del histórico inmueble, luego de agredir a golpes al personal de resguardo, intentaron penetrar al salón de plenos.

Tenían la intención de enfrentar a la diputada local del PAN, América Rangel Lorenzana, a quien acusan de: “¡Ya basta de que constantemente viole nuestros derechos humanos y garantías individuales consagradas en la Constitución!”, gritaba con el rostro enrojecido Victoria Sámano, del Colectivo Lleca, y otra de sus compañeras de la comunidad trans, mientras ésta última se liaba a golpes con los vigilantes del recinto legislativo.

 Todo comenzó alrededor de las 10:45 horas, cuando los manifestantes de diversas organizaciones trans llegaron al edificio, ubicado en las calles Donceles y Allende, para exigir que saliera la legisladora del blanquiazul, debido a que el pasado jueves presentó una iniciativa en la que plantea cárcel de tres a 10 años al adulto que aplique en un menor un tratamiento o una cirugía para cambiar el género con el que nació. 

La panista nunca se imaginó que su propuesta causaría indignación en la comunidad trans, quien califica la iniciativa como transfóbica, “llena de odio y que no reconoce los derechos de las infancias trans en México, pues no permite a los menores realizarse tratamientos u operaciones para cambiar de sexo”, acusaron.

Para ese momento, todo eran gritos y expresiones de repudio a la iniciativa de la panista. Aunque el personal de resguardo, decidió cerrar la puerta, sin permitir el acceso o salida del inmueble, dado que los manifestantes exigían que saliera América Rangel.

En ese momento apareció el diputado local del PAN, Héctor Barrera Marmolejo, quien el ver que el acceso principal estaba cerrado, optó por dirigirse a la pequeña puerta, situada a un costado del inmueble, sobre la calle de Donceles. Sólo que fue reconocido por los manifestantes, quienes literalmente lo corretearon, por lo que el legislador huyó hacía la calle de Cuba.

Esto provocó que los inconformes, azuzados por un sujeto que constantemente encabeza las manifestaciones, les informó que arriba de esa pequeña puerta están las oficinas de los panistas. Esto provocó que uno de los sujetos escalara el inmueble para intentar irrumpir el lugar, sólo que el personal de resguardo se lo impidió.

De inmediato, los manifestantes comenzaron a lanzar piedras y demás objetos contundentes, hasta romper los ventanales del salón de juntas de los panistas. Mientras que otros sujetos, realizaban pintas en el inmueble, para mostrar su rechazo a la propuesta de América Rangel.

En tanto, en las escalinatas apareció el diputado local de Morena, Temístocles Villanueva, defensor de la comunidad LGBTTTI+, al que los manifestantes le gritaron: “Orale, pinche Temis, haz tu chamba”. Pero cuando intentó llegar a la puerta de acceso, otro grupo comenzó a empujarlo para decirle: “¡Mejor vete mucho al verga, pinche diputado!”. Y el morenista, gustoso, decidió hacerles caso.

Cuando las manecillas del reloj marcaban las 11:00 horas, sin que apareciera algún policía, los manifestantes se apoderaron de los “tiralíneas” (tubos negros utilizados para delimitar la zona de acceso al recinto legislativo), para golpear los cristales y herrería de los grandes portones, hasta romperlos.

Mientras en el interior, en tribuna estaba el coordinador de la Asociación Parlamentaria Ciudadana (APC), Royfid Torres González, quien exponía el primer dictamen del orden del día –marcado como el punto 24–, por el que se reforman y adicionan los artículos 30, 84, 350 bis y 350 ter del Código Penal.

Pero la gritería del exterior, provocó que a las 11:10 horas, Zamorano Esparza decretó un receso de 10 minutos, a fin de solicitar el apoyo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC). Pero la policía tardó cerca de 30 minutos en llegar.

Esto fue aprovechado por Victoria Sámano, del Colectivo Lleca, y otras de sus compañeras de la comunidad trans, para penetrar al inmueble. Cuando un tercer sujeto intentó hacer lo mismo, fue contenido por personal de resguardo, mientras uno de los vigilantes comenzó arrojar el contenido de un extintor, lo que evitó el ingreso de más manifestantes.

Sin embargo, las dos mujeres, ya dentro del recinto, se liaron a golpes con los vigilantes, hasta lesionar a dos de ellos. Victoria estaba decidida a ingresar al salón de plenos, para encarar a la diputada del PAN. Obviamente, esto fue impedido por la gente de resguardo, por lo que continuó la agresión física de uno y otro bando.

Más tarde, la activista subió un video a las redes sociales, donde asegura haber sido agredida por los vigilantes del Congreso.

Cuando el personal de resguardo del Legislativo local, arrojaba el contenido de un tercer extintor, fue cuando llegaron los primeros “granaderos” –perdón, esos ya no existen, según la jefa de Gobierno, más bien son policías disfrazados de granaderos–, quienes con escudos de inmediato comenzaron a retirar de las escalinatas a los manifestantes.

Empero, ante la violencia que mostraban los integrantes de diversas organizaciones LGBTTTI+, minutos después llegaron más “granaderos” –perdón, de nueva cuenta, policías disfrazados de granaderos–, para encapsular a los manifestantes, hasta que fueron calmándose.

Para ese momento, la zona parecía un campo de guerra, donde prevalecía pintas por prácticamente todo el inmueble Legislativo, vidrios rotos en las escalinatas y policías y manifestantes semejaban ratones de panadería, cubiertos de polvo de los extintores esparcido por los vigilantes, esos mismos objetos con los que algunos fueron golpeados por los manifestantes.

Esto fue aprovechado por los vigilantes para sacar a una de las activistas, no así a Victoria Sámano, quien permaneció en el lobby, rodeada de elementos de resguardo, para gritar y grabar para las redes sociales: “¡Me están golpeando!”.

Aunque no grabó cuando uno de los policías internos la acompañó para que se sentara en las escalinatas del lobby, mientras tres trabajadoras del Congreso le daban agua, además de ayudarle a limpiarse el polvo del extintor de la cara.

 Esto no fue suficiente para el presidente de la Mesa Directiva, por lo que a las 11:55 horas declaró suspendida la sesión ordinaria, conforme al artículo 28 del Reglamento del Congreso local, aunque anunció que las actividades continuarán este miércoles.

La calma retornó alrededor de las 13:00 horas, cuando los activistas se retiraron y minutos después hicieron lo propio los uniformados –que no granaderos, eh, conste–; más tarde, comenzaron a salir diputados, secretarios técnicos y demás personal del recinto Legislativo, temerosos de encontrarse a alguno de los manifestantes, sobre todo la panista América Rangel, quien en ningún momento borró su irónica sonrisa durante los disturbios.

 Aunque eso sí, agradeció al personal de resguardo del Congreso local, por velar por su integridad.

“Afortunadamente estoy bien, luego de que un grupo de personas trataron de agredirme físicamente en el Congreso. Gracias a todos por sus mensajes. La violencia no es ni será nunca la solución”, enfatizó con displicencia.

 Reacciones.- Una vez suspendida la sesión, el grupo parlamentario de Morena convocó a conferencia de prensa, para pedir a los legisladores del PAN desistir de presentar iniciativas que vayan en contra de los derechos de los capitalinos, “pues reacciones como lo sucedido esta mañana”, acusaron.

 Martha Ávila Ventura, coordinadora de los morenista, denunció que la iniciativa de América Rangel, que busca prohibir que los menores de edad se sometan a tratamiento y cirugías de cambio de género, “va contra una ciudad que se caracteriza por sus derechos y progresividad”, dijo.

Además, adelantó que el Jurídico del Congreso capitalino levantará denuncias penales contra quien resulte responsable, por los daños ocasionados en el edificio legislativo, pues destacó que este recinto siempre ha estado abierto al diálogo, por lo que rechazó este tipo de violencia.

De igual forma, destacó que no apoyan la iniciativa de la legisladora panista y que, por obvias razones, votarán en contra de ella.

 Asimismo, en entrevista con Donceles, la líder morenista sostuvo que es fundamental que el presidente del Congreso local y los coordinadores parlamentarios asuman una estrategia de mayor amplitud respecto a la seguridad del recinto parlamentario.

 “Si bien es cierto que la autoridad absoluta es del presidente de la Mesa Directiva, cada una y uno de los legisladores, independientemente del partido político de procedencia, son representantes populares y durante las sesiones se debe garantizar la discusión libre y democrática”, afirmó.

Insistió que lo ocurrido este martes, debe abrir un debate entre la soberanía que representa el recinto, y la trascendencia que en términos de la ley tiene el Poder Legislativo.

“Ningún grupo debe irrumpir nunca una sesión del Congreso. Sólo los propios diputados pueden hacerlo en términos del Reglamento. La mediatización que se ha dado en las redes sociales no debe distraernos. Acá no se trata si un ‘determinado grupo de una comunidad de género’, vino a apoyar a una figura o la votación contra un punto. Acá el tema es que no se debe repetir el acto de irrumpir el Congreso”, enfatizó.

 Sin embargo, consideró como “graves” los hechos de esta mañana, “porque no es un asunto del género. De eso ya tendrán que responder los miembros de dicha comunidad. El tema del Congreso debe ser el respeto absoluto al recinto parlamentario. La paz y la no violencia, son pilares de nuestro sistema democrático”, aclaró.

Por ello, Ávila Ventura señaló que “ningún grupo o sector debe irrumpir el recinto. El porvenir de la democracia tiene su razón de ser. Y en el Congreso debe prevalecer la Ley. En el umbral superior del recinto, debe suscribirse la Ley, porque la Patria es Primero. Es muy grave está irrupción del Congreso. No es un asunto en términos del género solamente”, reiteró.

En este sentido, el flamante nuevo coordinador del PAN, Federico Döring Casar, se solidarizó con el personal de resguardo que resultó herido y destacó que este fue un hecho atípico e histórico.

También, rechazó que las ideas se combatan con la violencia, pues debe debatirse con argumentos, “pues  todos los aspectos ideológicos de la Ciudad se combaten con argumentos, no con violencia. Ojalá la Ciudad de los Derechos, no se transforme en la Ciudad de la intolerancia y la violencia”, destacó.

 


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